Al llegar a Williams, Carlos Sainz ha enfatizado la importancia de mejorar el simulador, buscando que este pueda cumplir ciertas expectativas tras su experiencia con Ferrari.
Williams se encuentra en un proceso de modernización y renovación, donde la actualización de herramientas es clave. Uno de los elementos fundamentales es el simulador, que, junto con el túnel de viento y el CFD, se ha convertido en un instrumento vital para cualquier equipo de Fórmula 1.
Este año, el equipo británico implementará un simulador de última generación, lo cual representa un avance significativo. Sin embargo, mientras tanto, Carlos Sainz se ha propuesto optimizar el simulador actual.
Además, Williams ha incorporado a uno de los pilotos de simulador más reconocidos en la Fórmula 1, Oliver Turvey. Aun así, Sainz aporta la perspectiva de haber trabajado con un simulador de alta precisión en Ferrari.
«La pista siempre debe ser la referencia; el simulador solo debe usarse si se asemeja a la realidad del circuito»
El simulador: una herramienta esencial
En un entorno de Fórmula 1 donde las pruebas en pista son limitadas, el simulador se ha convertido en una herramienta indispensable. No solo es clave para el desarrollo de los monoplazas, sino también para optimizar el rendimiento durante los grandes premios.
Mientras los pilotos titulares compiten en la pista, los conductores de simulador trabajan desde la sede buscando la configuración más adecuada o soluciones a los problemas que puedan surgir en el circuito.
Por ello, Carlos Sainz ha tomado muy en serio su papel desde su llegada a Williams. «Dejar mi huella es uno de mis principales objetivos. El simulador es una de las armas más poderosas que posee un equipo en Fórmula 1».
El piloto español es consciente del potencial que un simulador correctamente utilizado puede ofrecer, así que ha instado a Williams a «usar el simulador de la manera más coherente posible y a colaborar efectivamente con ingenieros y pilotos».
«Si se integran todos los elementos y se trabaja eficientemente, el simulador puede ser de gran ayuda. De lo contrario, es fácil perderse», advierte Carlos Sainz.
Siempre mejor la pista, pero…
Carlos Sainz es un firme defensor de las pruebas en circuito frente al uso del simulador, pero dada la normativa actual, es fundamental invertir tiempo y recursos en esta tecnología.
Así, la clave radica en que el simulador sea lo más fiel posible a la realidad, para que los resultados sean confiables y se avance sin confusión en el desarrollo del monoplaza.
Aunque el simulador no puede replicar por completo las condiciones de la pista, debe aproximarse lo más posible. «La pista siempre debe ser el referente; el simulador no debería utilizarse si no puede emularla», expone Sainz, quien reconoce que el simulador de Williams no alcanza el nivel de Ferrari.
«El simulador de Williams no ofrece la misma sensación que el de Ferrari, pero en aproximadamente cuatro o cinco meses deberíamos contar con el nuevo. Para entonces, queremos establecer un método de trabajo eficiente para aprovecharlo al máximo», concluye Sainz.
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